La Olla, un lugar donde la banda se siente cómoda y ya conocía por los shows que dio el año pasado. El ambiente del lugar acompañaba muy bien la estética de la banda, el rojo de las paredes parecían hechos con el mismo tono de Hacer Haciendo, el último disco de Sinviola.

Con el lugar completamente lleno - incluso había gente viendo el show parados - arrancaron con temas moviditos que atraparon a la audiencia. Siguieron con una serie más larga de temas intimos y más suaves - Cayueira y La Bossa infaltables - que aportaron una linda atmósfera entre la gente.
Cuando ya estaba cerrando el show estalló todo. Las bailarinas de la banda daban pasos entre las mesas y la gente, repartiendo energía de baile. Y así fue. En los últimos temas la gente espontáneamente se levantó de sus mesas y acompañó a la banda bailando y aplaudiendo. Entre las mesas, desde el pasillo, todo lugar era válido para expresar en movimientos lo que la música de Sinviola estaba proponiendo.
Baile y música en La Olla...